Lo que yo ví en aquel momento era lo mismo que se ve en la foto, algo flameando en un edificio a la distancia. Sin embargo, era necesario informar del hecho. Marqué Emergencias (911) y les expliqué lo que veía. Pero eso no fue suficiente e hicieron falta dos llamados más para que los bomberos pudieran dar con el incendio.
Consejos antes de llamar a Emergencias:
- Dar la ubicación lo más aproximada posible del siniestro; buscar un mapa en internet o en una guía si uno no está seguro. En mi caso, sólo podía decir que el incendio ocurria a aproximádamente un kilómetro de donde estaba yo. En internet busqué la intercepción de calles posibles. Luego llamé.
- Dar la mayor cantidad de detalles: por ejemplo, en mi caso, yo suponía que el incendio ocurría en los últimos pisos altos de un edificio de entre diez y doce pisos; aclaré que había una nube de humo oscura que iba a guiar a los bomberos mejor que yo, que no podía tener una dirección exacta.
- Tener tranquilidad y paciencia. Alguien va a llegar a socorrer a los perjudicados. En mi caso la respuesta de los bomberos fue rápida.
Eso es todo, y esta es una historia más de Buenos Aires.